LOS ANGELES - En el primer aniversario del motín del 6 de enero de 2021 en el Capitolio por extremistas que apoyan a Trump, la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA), la organización de derechos de los inmigrantes más grande de California, reconoce que la democracia a la que nuestros miembros buscan ingresar es en peligro cada vez mayor. No podemos quedarnos callados. Instamos a los legisladores del Senado a tomar medidas para proteger y fortalecer los cimientos de nuestra democracia.
Cinco oficiales y otros cuatro murieron trágicamente, decenas sufrieron heridas y el Capitolio fue profanado en el ataque sin precedentes provocado por un discurso de Trump mientras intentaba aferrarse a su puesto en la Casa Blanca. Hasta la fecha, más de 725 personas han sido acusadas, pero solo 165 se han declarado culpables y apenas 30 han sido condenadas a prisión.
"El Departamento de Justicia sigue comprometido a hacer responsables a todos los perpetradores del 6 de enero en cualquier nivel según la ley
- ya sea que estuvieran presentes ese día o que de alguna otra forma fueran responsables penalmente del asalto a nuestra democracia ", dijo ayer el Fiscal General Merrick Garland en un discurso para abordar este flagrante déficit. Esperamos que se mantenga fiel a su palabra.
En el año transcurrido desde el caos, un comité de investigación del Congreso continúa descubriendo una extensa planificación por parte de grupos extremistas en todo el país, la inacción deliberada de los líderes que podrían haber enviado ayuda a la policía del Capitolio y numerosos mensajes de texto y llamadas a Trump por parte de altos funcionarios, de derecha. comentaristas e incluso sus hijos, rogándole que detuviera a los alborotadores. Y, sin embargo, nadie relacionado con la administración Trump ha sido arrestado por su papel en el ataque. Esta es una parodia de la justicia.
Los legisladores deben poner fin al obstruccionismo, una tradición del Senado que hace décadas desaceleró la legislación histórica sobre el derecho al voto y hasta el día de hoy niega a los inmigrantes un camino hacia la ciudadanía. Mientras trabajamos para poner fin a esta injusticia de larga data al incluir la residencia permanente a través de una actualización del registro en la Ley Build Back Better, reconocemos que el Senado también debe aprobar leyes que protejan y fortalezcan los derechos de voto, incluida la Ley de Avance de los Derechos de Voto John Lewis, que restaura protecciones de la Ley de Derechos Electorales de 1965 recientemente destruida por la Corte Suprema de los Estados Unidos.
Atribuya las siguientes declaraciones a Angelica Salas, directora ejecutiva de CHIRLA:
"Los inmigrantes que desean desesperadamente formar parte de esta democracia ven consternados cómo los principios de justicia igualitaria y cumplimiento de la ley, que creían que existían en este país, son pisoteados hasta quedar irreconocibles. Para muchos, lo que está sucediendo con el 6 de enero casos se siente como un déjà vu desalentador. Es lo que vieron en sus países de origen y por qué huyeron de ellos con la esperanza de un futuro mejor y más justo aquí.
"Trump no ganó el 3 de noviembre de 2020 ni el 6 de enero de 2021, pero eso no significa que sus seguidores extremistas estén descansando ahora. Están moviendo todas las palancas de poder que pueden para destruir los controles y equilibrios de nuestra democracia: Las cámaras estatales están aprobando medidas que permiten a los legisladores anular la voluntad de los votantes; los gobernadores están dificultando que los votantes de color expresen su voluntad política; los miembros de las milicias incluso se están presentando en uniforme para intimidar a los ayuntamientos para que cumplan sus órdenes. decimos, '¿Suficiente?'
"Podemos proteger nuestra democracia, y comienza con una acción en el Senado. Instamos al líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, a que ponga fin al obstruccionismo, permitiendo la aprobación de protecciones del derecho al voto como la Ley de Promoción del Derecho al Voto de John Lewis. Los inmigrantes ansiosos por convertirse en ciudadanos estadounidenses quieren el país que han ayudado a construir sea esa democracia en la que cada voto, incluido el suyo un día, cuenta ".
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